La desembocadura del río Guadalquivir, en Sanlúcar de Barrameda, provincia de Cádiz, es uno de los ecosistemas más productivos y ricos del mundo en lo que a pesca de marisco se refiere. La reserva de esta zona cuenta con una extraordinaria variedad de especies autóctonas que son reconocidas mundialmente como manjares para los paladares más exquisitos.
Una buena manera de disfrutar de los mariscos que ofrece la desembocadura del río Guadalquivir es visitando esta localidad de Sanlúcar de Barrameda, mundialmente conocida por su marisco y por las carreras de caballos en la playa de Bajo de Guía.
Pero, si no es posible hacerlo en persona, lo ideal es encargar los famosos Langostinos de Sanlúcar a través de una página web de confianza que ofrezca garantías de frescura, productos propios pescados por ellos mismos, piezas de marisco seleccionadas por su calidad y que certifiquen el origen de estas piezas.
Para distinguir una buena pieza de auténtico langostino de Sanlúcar éste debe tener: bigotes gruesos, fuertes y alargados. En el lomo las manchas aparecerán poco marcadas, y el final de la cola suele ser de color azul tornasolado. Al cocerse esta característica se pierde. El sabor es otra de sus características, la más importante, de hecho, ya que la desembocadura del río y los alrededores del Coto de Doñana aportan una biodiversidad que se refleja en la alimentación del langostino. Y, por tanto, de su sabor particular.
Cocción perfecta
Una buena pieza de marisco debe estar debidamente cocida en su punto, para ello se debe controlar la temperatura de cocción, el tiempo de hervido, así como el punto de sal más adecuado. Solo de esta manera se podrá hablar de un marisco excepcional y preparado de manera tradicional. Es conocido, mundialmente, como marisco de Huelva, ya que la desembocadura del Guadalquivir une a estas dos provincias andaluzas en sus dos orillas.
Otra de las características que debe tener una buena pieza de marisco de Sanlúcar es la frescura extrema. Por ello, es ideal que se adquieran productos recién pescados y recién llevados a la lonja. Este marisco se debe disponer en envases que conservan el frío y bajo los más rigurosos controles de calidad. Por supuesto, siguiendo todas las disposiciones sanitarias al respecto. Esta cadena de frío no se debe romper en ningún momento, por lo que los envíos por internet deben contar con un plazo de entrega muy corto. Es por ello que se debe ofrecer al cliente la posibilidad de elegir fecha y hora de entrega. Solo así se podrá garantizar la frescura del pedido.
Productos frescos
Otra de las cuestiones a tener en cuenta es que la web de venta de marisco y langostinos de Sanlúcar de Barrameda frescos ofrezca distintas opciones de compra.
Aparte de los citados langostinos, que se pueden comprar enteros o también solo troncos o solo colas, también pueden ofertar otras especies de la zona como pueden ser: gambas blancas de Huelva, cigalas de Huelva, carabineros o colas de carabineros, camarones, quisquillas, huevas de choco, patas, patas con boca, bueyes de mar o nécoras.
También es muy interesante si se va a celebrar un evento familiar o con amigos, tener en cuenta la opción de encargar una mariscada. De esta forma, se podrá disfrutar de un poco de todo y deleitarse con el mejor marisco de la desembocadura del Guadalquivir. Los precios variarán en función de la cantidad y de los mariscos que se elijan, pero siempre será una opción perfecta para celebraciones.
Los langostinos de Sanlúcar de Barrameda y las gambas blancas de Huelva no solo se pueden tomar en Navidad. Si se quiere disfrutar de un buen bocado de mar en cualquier época del año, lo ideal es optar por comprar el marisco en distribuidores de confianza, anclados al territorio y que conocen a fondo el producto, tanto su calidad como su preparación.